Distintas parroquias de nuestra Diócesis acogen desde mañana las “24 horas para el Señor”

Parroquias como la de San Caetano o San Fernando, en Santiago; la Iglesia Nueva de Santa Cruz, en Oleiros; la de Santiago, en O Burgo; o el Templo Antiguo de Marín acogerán desde mañana viernes día 29 de marzo al sábado día 30 las “24 Horas para el Señor”, una iniciativa de oración y alabanza a Dios surgida en el contexto del Año de la Fe convocado por el entonces papa Benedicto XVI.

Desde entonces, esta iniciativa se ha extendido por todas las diócesis del mundo. Mañana, día 29 de marzo con la celebración de la Liturgia Penitencial presidida por el Papa Francisco en la Basílica de San Pedro, se dará inicio a esta sexta edición de las “24 horas para el Señor”, iniciativa de oración y reflexión promovida por el Consejo Pontificio para la Promoción de la Nueva Evangelización.

En una entrevista publicada en Vatican News por Renato Martinez a monseñor Octavio Ruiz Arenas, secretario de dicho consejo pontificio, éste asegura que “la gracia y la misericordia del Señor es la mejor medicina para nuestra conciencia, por eso los invito para que con humildad, sencillez nos acerquemos a la misericordia, a la ternura del amor de Dios, no hay pecado que no pueda ser perdonado si hay un verdadero arrepentimiento y un verdadero cambio de vida.

En esta edición la oración y reflexión promovida por este Dicasterio Vaticano se inspira en el Evangelio de San Juan (8, 11): “Tampoco yo te condeno” y tendrá en Roma su apertura con la celebración penitencial presidida por el Papa Francisco este viernes 29 de marzo, a las 5:00 de la tarde, en la Basílica de San Pedro.

24 Horas para el Señor y el Año de la Fe

Mons. Octavio Ruiz Arenas recordó que, esta iniciativa tuvo sus orígenes en el Año de la Fe (2012 – 2013), donde se tuvo una experiencia de adoración con el Santísimo Sacramento durante las 24 horas a lo largo de todo el mundo. “En esa experiencia mucha gente pedía poder confesarse, entonces a partir del año siguiente – señala el Secretario – se le pidió al Papa Francisco que, si le parecía oportuno, pudiéramos establecer una iniciativa que hemos llamado ‘24 Horas para el Señor’, pidiendo a algunas iglesias aquí en Roma que adoraran durante la noche ofreciendo el sacramento de la reconciliación, hubo una respuesta muy grande, y se terminaba al día siguiente con una Eucaristía conclusiva”. A partir de ahí, precisa Mons. Ruiz Arenas, hemos venido celebrando año tras año esta iniciativa, que tuvo un impulso muy grande con ocasión del Jubileo de la Misericordia. “Fue una ocasión en la que muchísimas iglesias particulares en el mundo entero acogieron esta iniciativa y podríamos decir que, ya en esta 6° Edición se cuenta con la mayoría de las diócesis en todo el mundo”.

Liturgia Penitencial: don de la misericordia del Señor

El Secretario del Consejo Pontificio para la Promoción de la Nueva Evangelización explicando las características de la Liturgia Penitencial con la cual se dará inicio a las “24 Horas para el Señor”, dijo que, “esta celebración penitencial a partir de una lecturas bíblicas y una breve homilía del Santo Padre, dará espacio a las confesiones, y será el Papa el primero en confesarse, ha dado siempre el ejemplo diciendo que él también es un pecador y que necesita de la gracia y del don de la misericordia del Señor. Este gesto hermoso del Papa – señala Mons. Ruiz Arenas – de arrodillarse con humildad ante un sacerdote para confesarse, para darnos ejemplo a nosotros, para que no tengamos temor y vayamos con confianza ante el Señor, porque Él está siempre dispuesto a perdonarnos”.

El Papa confesará a 11 penitentes

Generalmente en esta Celebración Penitencial, explica Mons. Ruiz arenas, el Papa confiesa a un grupo reducido de personas, en lengua italiana y español, “en esta ocasión van a ser 11 personas provenientes de Italia, Polonia, Vietnam y Colombia, es un grupo reducido porque se tiene en cuenta las múltiples actividades que tiene el Santo Padre y para no alargar demasiado la celebración en la Basílica de San Pedro. Simultáneamente – señala el Secretario – comienzan en la mayoría de las iglesias a ofrecer este don del sacramento de la misericordia invitando a las personas a acercarse al Señor, porque esta celebración se realiza en el marco de una adoración Eucarística y que aprovechen para confesarse”.